Las mitocondrias son diminutas partículas dentro de las células que nos ayudan a producir energía.
Lo curioso es que, el paquete genético, sólo se heredan de la madre y no del padre.
Además, son una copia exacta de lo que había en el óvulo materno y su cadena evolutiva es de madre a hija y de hija a nieta, etc, etc.
Luego su origen es materno, ya que es el óvulo el que aporta las mitocondrias a la célula original, poseyendo estas ADN cuya información es rigurosamente transmitida al nuevo ser.
Estas premisas y, tras varios estudios coincidentes, nos sitúan en África hace unos 150.000 años en un área geográfica que abarca la zona de Tanzania, Kenia y Etiopía, dónde se cree existió la primera mujer, la madre de todos nosotros o, dicho de otra forma, la mujer que transmitió a todos sus descendientes el archivo mitocondrial.
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