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Carcasona, es una ciudad del Departamento francés de Occitania que guarda la huella medieval intacta, y es uno de los sitios que nos piden a gritos un viaje cultural.
Su origen es el de una colina que predomina el valle del Aude con fortificaciones pre-romanas que se convirtió en un importante sitio comercial (siglo VI a.C), después hacia 800 años d.C., la ciudad de la colina pasó a ser un importante centro de intercambio de esos pueblos entre el Atlántico y el Mediterráneo.
Hoy es una ciudad que no supera los 70.000 habitantes, las más poblada del Departamento de Aude, pero guarda el encanto medieval que los franceses han sabido conservar.
Los romanos la fortifican en el año 100 a.C., y la llaman Carcasum. En el siglo V d.C., los visigodos ocuparon la ciudad y siguieron construyendo fortificaciones, los francos no pudieron ocuparla cuatro siglos más tarde, aunque allá por el 725 d.C., los árabes la someten pero tres décadas más tarde Pipino el Breve los expulsó. En el año 1067, a traves de enlaces matrimoniales, Carcasona pasó a ser propiedad de Raimundo Bernardo Trencavel, éste se alió con los Condes de Barcelona y otras veces con los de Tolosa.
En el año 1213, la batalla de Muret, ganada por Simón de Montfort contra el Rey Pedro II de Aragón origina un preludio de dominio de los reyes de Francia, aunque años más tarde, perteneció a la Corona de Aragón. Definitivamente, Occitania quedó hasta nuestro días en manos francesas.