LA LEYENDA QUE PESA SOBRE EL TEATRO ROMEA DE MURCIA

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Esta leyenda o maldición sobre este hermoso teatro Romea de Murcia es más que curiosa e inquitante. Sobre el terreno que actaulmente se asienta el majestuoso teatro, correspondía antiguamente, siglo XIX, a la Orden de los Dominicos, que tenían su iglesia, cementerio y huerto.

La Desamortización de Mendizábal privó a la iglesia de dicho territorio del cementerio y el huerto. Un monje del Convento molesto por la expropiación divulgó una maldición aterradora que decía: ''Ocurriran tres incendios en la historia de éste Teatro: en el primero no fallecerá ninguna persona, en el segundo fallecerá una persona y en el tercero, con el teatro completo morirían todos''. La realidad, y ahí está lo inquietantante, es que en el año 1877 hubo un incendio que dejó el Teatro en ruinas, y no murió nadie y el teatro se reconstruye y se le cambia el nombre, que pasó de Teatro de los Infantes a ''Teatro de la Soberanía Popular''.

En el segundo incendio acaecido en el año 1889 murió una persona, fue un joven que pasó al Teatro en llamas por si había que rescatar a alguna persona.

Se reconstruye tomando el nombre actual de ''Teatro Romea''. Sea como fuere de alguna forma se espera con pavor el trercer incendio y siguiendo al pié de la letra la profecía, los taquilleros dejan algunas entradas sin vender para no incurrir en el lleno completo.