'El mentiroso ha de ser memorioso' es una frase antigua de siglos que ya no utilizamos, pero todos sabemos las consecuencias y es que para mentir, hay que saber mentir y es fundamental acordarte de los detalles de la mentira que has dicho, y eso, eso es lo más difícil de hacer.
Descubrir una mentira es mucho más fácil cuando el mentiroso falla con los detalles ya que no quiso, no supo o no pudo memorizarlos.
Es una frase de origen popular.
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