El símil le da mucha importancia a la comida y aconseja no tomársela a broma. Es una advertencia muy seria y la 'comida' es sólo un símil, porque la referencia va por las cosas importantes en las que estemos ocupados.
De forma que, la frase advierte a aquellos que hacen tonterías con cosas serias, y son apercibidos del desastre que les puede acarrear esta actitud.
La frase se engendró en el siglo XX, se hizo popular y es muy usada en el periodismo, las tertulias, etc, pero su origen es desconocido, por lo que es de autor anónimo.
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