Cuando una frase hecha, o un dicho o refrán perviven a través del tiempo es que a demás de tener rima, gracia o lo que queramos suponerle, es que dice verdad.
'Los niños y los borrachos, siempre dicen la verdad' es una frase que nos viene a decir que, la imprudencia parlanchina de un borracho o la inocencia de un niño, dan al traste con cualquier secreto y lo cuentan.
El origen es antiquísimo, aunque con otra estructura pero viene a decir lo mismo.
Los romanos lo tomaron de los griegos y estos del latín 'In vino veritas'.
En español apareció escrito en el siglo XVI (año 1528) en 'La lozana andaluza' con la construcción: 'Los niños y los locos dicen las verdades'.
Los romanos lo tomaron de los griegos y estos del latín 'In vino veritas'.
En español apareció escrito en el siglo XVI (año 1528) en 'La lozana andaluza' con la construcción: 'Los niños y los locos dicen las verdades'.
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