Los franceses llaman al mistela "vin muté" y nosotros "mosto apagado".
No hay que confundir la mistela con cualquier otro tipo de vino dulce ya que existen varias diferencias, no sólo en la producción, sino en el bouquet y sabores.
Es un tipo de vino reciente, producto de las dos últimas décadas, pero elaborado bajo condiciones de control muy exaustivas. Tiene demanda y es muy apreciado por personas amantes de lo natural y enemigos de la química.
Está prohibido usar productos químicos ni en el terreno, ni en la viña, ni en los abonos, ni en los procesos de vinificación. Tan sólo el cloruro de cobre rebajado sin productos fitosanitarios industriales, directamente a la uva, en caso de plaga. Eso quiere decir que, por su naturaleza y cuidados, se transmiten al vino de forma natural y espontánea las propiedades de la cosecha y el terreno.
España e Italia son los principales productores de este tipo de caldos que requieren, secano, poca lluvia y mucha ventilación.
Seguiré comentando sobre el particular, que por su extensión y para no cansaros, es mejor ir desvelándolo en "pequeños sorbos" como debe tomarse el vino, precisamente.
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