Octavio Martínez Fernández, "Nacional" nace Almería en 1.927.
Trás una vida llena de peripecias, sobre todo por la época que le tocó vivir en plena guerra civil, por fín ve cumplido sus sueños el 1 de junio de 1.946 al vestirse de luces, como novillero, en Arévalo.
Muy conocido por salir de espontáneo, nada menos que en la Plaza de Toros de las Ventas de Madrid, logró tres años más tarde, el 20 de marzo de 1.949, torear una novillada, junto a Alejandro García y José Calabuig, toreando con éxito novillos de Arcadio Albarrán.
Por fin logra ser torero y toma la alternativa el 8 de mayo de 1.952 en Madrid en la Plaza de Toros de Vista Alegre, junto con el mexicano Cañitas como padrino y el Niño de la Palma (hijo) como testigo, con toros de Muriel.
Se confirma en Las Ventas el 25 de julio de 1.953 con toros de Atanasio Fernández, con Luis Mata como padrino y Jaime Malaver como testigo.
Fue testigo en la alternativa de Gitanillo de Triana Chico, el 10 de agosto de 1.952 en Vista Alegre.
Quizás no fuera muy famoso, pero es una persona que logró cumplir sus sueños a base de pundonor y sacrificio, muy digna de reconocimiento.
Promovió en 1.970, ya retirado, la inauguración de la Plaza de Toros de Las Palmas de Gran Canaria, que contó con un concurrencia de 14.000 espectadores.
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